martes, 23 de agosto de 2016

Sacerdote iraquí exige a comunidad internacional detener genocidio de cristianos

El P. Rebwar Basa, sacerdote iraquí que participó en el Meeting de Rimini, señaló que la persecución que sufren los cristianos en Irak a manos del Estado Islámico (ISIS) debe ser definida como “genocidio”, y exigió a la comunidad internacional cumplir con su deber de salvar lo que “aún es salvable” y proteger a esta minoría religiosa.
“Soy un sacerdote iraquí y conozco bien la situación de los cristianos en Irak y sus grandes sufrimientos. Por lo que concierne a Irak, confirmo con firmeza que no solo ‘puede’, sino ‘debe’ ser definido como genocidio. Y subrayo que la comunidad internacional debe cumplir su deber de salvar aquello que aún es salvable, garantizar la seguridad de los cristianos y defender sus derechos”, expresó a ACI Prensa.
Sin embargo, el P. Basa señaló que desde que desde sus inicios la Iglesiaen Irak ha sido “una Iglesia mártir” que ha vivido un éxodo silencioso. Por ello, expresó su deseo de que ahora “que se habla de la persecución”, se pase a la acción antes de que sea demasiado tarde.
El sacerdote denunció que hay “una seria intención de borrar todo lo que nos une como cristianos”, y por ello los terroristas islámicos primero los etiquetaron con la “n” árabe para marcarlos como nazarenos, “nuestra identidad cristiana”, y luego les quitaron sus propiedades, violaron y vendieron como esclavas a las mujeres, destruyeron las iglesias o las convirtieron en mezquitas; además de otros crímenes “simplemente por la identidad cristiana”.
A pesar de ello, el P. Basa afirmó que “para nosotros es una bendición ser perseguidos” por ser discípulos de Cristo. “Los cristianos en Irak –con una presencia milenaria– dan un ejemplo muy concreto de cómo debemos seguir al Señor Jesús, negándose a sí mismos y tomando su cruz y siguiéndolo”, señaló.
Además, recordó que los cristianos de Medio Oriente tienen un “rol indispensable” en el diálogo entre las diversas culturas.
“Por ejemplo: los cristianos dieron a conocer al mundo árabe la filosofía griega traduciendo del griego al arameo y del arameo al árabe. Y hoy más que nunca tienen este rol de hacer de puente entre Oriente y Occidente, gracias a su conocimiento del mundo árabe y musulmán de un lado y la fe y de otro lado cultura cristiana compartida con Occidente”, explicó.
Durante la entrevista, el sacerdote también exigió que se “garantice el derecho de los cristianos a existir y vivir una vida digna como hijos de Dios y seres humanos”.
“Es solo gracias a la Iglesia local y universal que los cristianos perseguidos del autoproclamado Estado Islámico han llegado a sobrevivir en estos dos años”, junto al constante apoyo de la fundación pontificia Ayuda a la Iglesia Necesitada, afirmó.
En ese sentido, aunque ve “muy difícil” un futuro para los cristianos en Irak “si la situación continúa así”, el sacerdote recordó que “para Dios no hay nada imposible”.
“Si los derechos humanos son respetados y la libertad religiosa es garantizada para todos, no solo los cristianos de hoy en Irak tendrán un futuro, sin que muchos se convertirán. Así el famoso dicho de Tertuliano que ‘la sangre de los mártires es semilla de cristianos’ podrá realizarse en esta tierra de persecución”, aseguró.
Traducido y adaptado por Eduardo Berdejo. Publicado originalmente en ACI Stampa.

¿Por qué se ora con las manos juntas? Conoce el rico simbolismo de este gesto

web-Fernando Mafra-cc - es




¿Por qué se ora con las manos juntas? Por su simbolismo. La oración exige una adecuada posición de las manos.
En la antigüedad cristiana se acostumbraba a levantarlas, en postura de ofrecer o de recibir.Tal es la actitud de los orantes, como vemos en los frescos de las catacumbas romanas y que todavía hoy se observa. El sacerdote en algunos momentos de la misa levanta sus manos.
Posteriormente se introdujo el uso de las manos juntas. Las manos juntas recuerdan el gesto tan antiguo de atar las manos a los prisioneros(acción que aún se conserva hoy con las esposas). Es por esto que los que iban a ser martirizados iban con sus manos juntas y en esos momentos, con toda seguridad oraban.
En el mundo romano, un  capturado podía evitar la muerte inmediata adoptando esta postura de las manos atadas, como en actitud de suplica, pidiendo piedad; hoy este gesto se ha sustituido con el gesto de izar una bandera blanca para expresar rendición.
Se sabe también que en la Edad Media, los vasallos prometían fidelidad a los señores feudales uniendo las manos. Por esto el cristianismo asumió el gesto como signo de la obediencia total del hombre a la autoridad de Dios y las manos unidas pasaron a expresar la sumisión del hombre respecto a su Creador.
Este gesto se conserva hoy en el rito de ordenación: el  ministro ordenado pone sus manos juntas entre las manos del obispo.
La actitud de tener las manos juntas es también el gesto de uno que se concentra en algo, que interioriza sus sentimientos de fe. Es la postura de unas manos en paz y no "distraídas" en el momento de orar.
Además las manos juntas es señal de que se es consciente de estar en la presencia de Dios; por tanto es un gesto de humildad, de actitud orante y confiada.
Es el gesto más apropiado a la celebración litúrgica cuando las manos no deben emplearse de otra manera en otros ritos. Y finalmente es la mejor postura a la hora de ir a comulgar.
 

Recemos unos por otros

No sé si es el efecto Francisco o que, simplemente, me voy dando cuenta de la importancia que tiene, pero yo cada vez pido a más gente que rece por mí, por mi matrimonio y por mi familia. La última vez, ayer mismo, a través de Facebook, a un sacerdote amigo que está en el santuario de Lourdes. Y también tengo que decir que me encuentro con más gente cada día que me pide lo mismo, que rece por ellos y ellas.
Creo que es bueno y necesario asumir el compromiso de rezar unos por otros. Al final, más que algo mecánico, se trata de poner delante de Dios, a los pies del Sagrario, en lo más hondo de nuestro corazón… un nombre, una intención, una situación… y pedirle al Señor o a María, o a algún santo, que acompañen, que se haga la voluntad del Padre, que aporten luz, verdad y vida. ¿Quién no necesita eso?
  • Rezar unos por otros supone implicarnos unos y otros en la salvación mutua y también en la acogida del Reino ya presente en esta vida que nos ha tocado vivir.
  • Rezar unos por otros supone aceptar que solos no podemos y que no siempre lo que se necesitan son consejos humanos, hombros en los que llorar, manos a las que agarrarse…
  • Rezar unos por otros supone encarnar la oración y darle horizontalidad a la de por sí mirada vertical hacia el cielo.
  • Rezar unos por otros supone descentrarnos de nosotros mismos y poner delante de Dios a otros más que a mí.
  • Rezar unos por otros supone vivir un aspecto de la fraternidad menos visible pero de frutos intensos y duraderos.
  • Rezar unos por otros supone vivir confortados cualquier circunstancia que la vida nos depare, sabiendo que en el camino no viajamos en soledad y que muchos son los que nos acompañan en las alegrías y también en el dolor.
  • Rezar unos por otros supone generar en el mundo una corriente espiritual de gran intensidad que hace que este mundo, individualista, materialista, interesado, etc. sea un mundo mejor.
No es la primera vez que me veo en la tesitura de ofrecer mi oración como lo mejor que puedo aportar. Lo hago incluso con personas no creyentes o alejadas de la Iglesia. A ellos nos les pido que recen por mí pero si les digo que, desde mi fe, voy a rezar por ellos. Nunca he encontrado rechazo sino más bien, al revés, agradecimiento.
Para este año, tengo en mente llenar el oratorio de los niños en el cole de nombres y de intenciones y de fomentar esto desde la más tierna infancia. Estoy convencido de que saldremos todos beneficiados.

Cuando no se sabe que no se sabe, pero se cree que se sabe: el “efecto Dunning-Kruger” Un sesgo cognitivo que consiste en la mala interpretación de las propias capacidades resulta en una sobrevaloración de la incompetencia.

En diciembre de 1999, Justin Kruger y David Dunning, dos investigadores de la Universidad de Cornell, en Nueva York, publicaron los resultados de un estudio que procuraba verificar si la afirmación de Darwin que asegura que “la ignorancia genera confianza más frecuentemente que el conocimiento” era cierta o no. Algo de esto ya sabía Sócrates, al afirmar que, si algo sabía, era que, precisamente, no sabía nada.
Sus resultados arrojaron que, en efecto, individuos con escasas habilidades o conocimientos tienden a sufrir de un sentimiento de superioridad ilusorio, y se consideran más inteligentes y preparados que aquellas personas que, en efecto, lo son. Se trata de un sesgo cognitivo que impide medir correctamente la propia incapacidad e ineptitud. En resumen, el llamado “efecto Duning-Kruger” explica que “La sobrevaloración del incompetente nace de la mala interpretación de la capacidad de uno mismo. La infravaloración del competente nace de la mala interpretación de la capacidad de los demás”.
Las hipótesis de Kruger y Dunning pueden resumirse en cuatro: 1) Los individuos incompetentes tienen la tendencia de sobreestimar sus propias habilidades 2) estos mismos individuos incompetentes son incapaces de reconocer las habilidades de otros y, en consecuencia, los consideran inferiores a ellos 3) Los individuos incompetentes son incapaces de reconocer su extrema insuficiencia 4) pero si reciben suficiente entrenamiento como para para mejorar significativamente su propio nivel de habilidades y conocimiento, estos individuos pueden llegar a reconocer y aceptar su falta de habilidades previa. En su estudio, los investigadores descubrieron que, mientras los sujetos más brillantes se consideraban a sí mismos como por debajo de la media, los menos dotados se consideraban por encima.
El propio estudio de Dunning y Kruger (que les valió el premio IG Nobel en el año 2000), concluyó que “los participantes que puntuaron en el peor cuarto del total en las pruebas de humor, gramática y lógica, sobreestimaban con mucho su habilidad y su resultado en prueba. A pesar de que las puntuaciones de las pruebas los colocaban en el 12 % peor, ellos se consideraban entre el 62 por ciento”. En resumen, que el llamado “efecto Dunning-Kruger” es un sesgo cognitivo que, a través de un sentimiento de superioridad infundado, impide a los individuos de escasas habilidades caer en cuenta de su propia ineptitud.

Martes de la vigésima primera semana del tiempo ordinario


Segunda Carta de San Pablo a los Tesalonicenses 2,1-3a.14-17. 

Acerca de la Venida de nuestro Señor Jesucristo y de nuestra reunión con él, les rogamos, hermanos,
que no se dejen perturbar fácilmente ni se alarmen, sea por anuncios proféticos, o por palabras o cartas atribuidas a nosotros, que hacen creer que el Día del Señor ya ha llegado.
Que nadie los engañe de ninguna manera. Porque antes tiene que venir la apostasía y manifestarse el hombre impío, el Ser condenado a la perdición,
El los llamó, por medio de nuestro Evangelio, para que posean la gloria de nuestro Señor Jesucristo.
Por lo tanto, hermanos, manténganse firmes y conserven fielmente las tradiciones que aprendieron de nosotros, sea oralmente o por carta.
Que nuestro Señor Jesucristo y Dios, nuestro Padre, que nos amó y nos dio gratuitamente un consuelo eterno y una feliz esperanza,
los reconforte y fortalezca en toda obra y en toda palabra buena.



Salmo 96(95),10.11-12a.12b-13. 
Digan entre las naciones: «El Señor reina!
El mundo está firme y no vacilará.
El Señor juzgará a los pueblos con rectitud.»
Alégrese el cielo y exulte la tierra,

resuene el mar y todo lo que hay en él;
regocíjese el campo con todos sus frutos,
griten de gozo los árboles del bosque.
Griten de gozo delante del Señor,

porque él viene a gobernar la tierra:
Él gobernará al mundo con justicia,
y a los pueblos con su verdad.




Evangelio según San Mateo 23,23-26. 
¡Ay de ustedes, escribas y fariseos hipócritas, que pagan el diezmo de la menta, del hinojo y del comino, y descuidan lo esencial de la Ley: la justicia, la misericordia y la fidelidad! Hay que practicar esto, sin descuidar aquello.
¡Guías ciegos, que filtran el mosquito y se tragan el camello!
¡Ay de ustedes, escribas y fariseos hipócritas, que limpian por fuera la copa y el plato, mientras que por dentro están llenos de codicia y desenfreno!
¡Fariseo ciego! Limpia primero la copa por dentro, y así también quedará limpia por fuera.




Leer el comentario del Evangelio por : San Pedro Damián