jueves, 18 de enero de 2018

El impresionante testimonio de Pilar Soto: “Cristo me salvó la vida”

La popular presentadora, que trabajó varios años en Intereconomía TV, narró su conversión en la Parroquia Asunción de Nuestra Señora, de Colmenar del Arroyo. Vea el vídeo aquí.
Fue uno de los rostros más populares y queridos de la televisión española en los años 90, presentadora, directora, guionista y coproductora de programas de TV, además de, pianista, modelo y actriz. Dio sus primeros pasos profesionales como pianista, pero rápidamente su rostro angelical, preparación y simpatía,  le granjearon un puesto en los programas de repercusión de la época. Pilar lo tenía todo. Brillaba con éxito y luz propia, pero de repente desapareció de la pequeña  pantalla y de los medios de comunicación.
Entre la vida y la muerte
Pero en 2004, en la cumbre del éxito, desapareció del mundo de la pantalla. Una gravísima bulimia ocultaba una terrible soledad y sufrimiento. En un año ingresa 82 veces en el hospital: “En 2004 estaba muy enferma, por eso acepté entrar en un ‘reality’ como ‘La isla de los famosos”. “El plan, para mí, era perfecto. No se comía y encima trabajaba. Nadie se daría cuenta de lo que pasaba”.
Ocurrió lo que tenía que ocurrir. Pilar, acribillada por los mosquitos jejenes en la isla caribeña, tocó fondo: “Estar allí fue una decisión catastrófica para mi salud y para mi carrera”. Tuvo que dejar el programa. “Llegué a pesar 37 kilos y mido 1,70. Fue horrible”.
Una noche, volviendo a casa en taxi de una Gala de televisión en directo, pierde el conocimiento y se descubre en un hospital al borde de la muerte. Esta vez la inanición le produjo una bajada mortal de potasio. Se despertó agonizando en una camilla del hospital de la Princesa de Madrid.
Reza como cuando era niña
Los médicos nada pueden hacer. Le ofrecen llamar a alguien para despedirse. Desde el silencio vuelve a rezar como cuando era niña, y llama a Cristo.
Una experiencia sobrenatural que cambió radicalmente su vida
Aquella  madrugada, Pilar tiene una visión interior de Cristo crucificado. Esta visión la consuela, la fortalece, y la salva de la muerte: “Estaba en la cama, sabía que me moría. No podía ni hablar. Escuchaba los latidos de mi corazón y… de pronto vi a Cristo en la cruz”.
Esta visión fue la que le dio la fuerza,  le devolvió la vida y le abrió la puerta de su fascinante Conversión.
La aventura de su búsqueda espiritual
Este acontecimiento transforma radicalmente la vida de Pilar. Su encuentro con Cristo produce en ella una profunda conversión. Entonces comienza la aventura de su búsqueda  espiritual.
Busca a Cristo: peregrina por distintos Santuarios: Asís, Lourdes, Fatima, Medjugorie, Tierra Santa; conoce a los franciscanos, a quienes se vinculará intensamente​, e inicia un profundo proceso de reconciliación consigo misma y con su pasado.
Conversión es la novela autobiográfica que acaba de escribir, en el que narra el camino de su conversión. En ella, Pilar Soto relata en primera persona cómo fue aquella noche, y cómo después, las circunstancias la llevarán a vivir al límite de lo desconocido.
Conversión, es una novela impactante que recorre 10 años y miles de kilómetros de combate apasionado. Es “una abierta declaración de amor a Dios, a la Vida y la Libertad”. “Ahora solo una imagen rige mi vida, la de Jesús resucitado”.
Sobre Pilar Soto
Comenzó su carrera profesional en 1994 como presentadora en Telecinco. Para ampliar sus estudios marcha a Londres en 1996, donde empieza​ a trabajar como modelo. A su vuelta regresa a Telecinco, incorporándose a la serie Al salir de clase en 1998, donde interpretó a Pamela. A partir de ese momento fue adquiriendo fama y presentó Peque Prix en La 1; en 1998, co-presentó Grand Prix con Ramón García; en 1999, y Mundo Musical en TVE Internacional. Entre 1999 y 2001 colaboró con Telepasión española, y en los años 2000 y 2001 continuó su carrera al frente de la pantalla con el programa Mamma mía en Telemadrid, momento en que también presenta las Campanadas de fin de año.
En 2004, se alejó de la pequeña pantalla debido a sus problemas de alimentación y se traslada a Estados Unidos y México donde comienza su proceso de conversión.
En 2007, ya en España, comienza a trabajar en Popular TV hasta 2008, año en el que habla públicamente de su conversión y de cómo estuvo al borde de la muerte.
De 2009 a 2013 trabajará para Intereconomía como directora, guionista, y presentadora de La Partytura, Colócate, Click TV y Convidium y colabora y co-presenta otros como No Me Lo Quero creer.

Jueves de la segunda semana del tiempo orfdinario


Primer Libro de Samuel 18,6-9.19,1-7. 

A su regreso, después que David derrotó al filisteo, las mujeres de todas las ciudades de Israel salían a recibir al rey Saúl, cantando y bailando, al son jubiloso de tamboriles y triángulos.
Y mientras danzaban, las mujeres cantaban a coro: "Saúl ha matado a miles y David a decenas de miles".
Saúl se puso furioso y muy disgustado por todo aquello, pensó: "A David le atribuyen los diez mil, y a mí tan sólo los mil. ¡Ya no le falta más que la realeza!".
Y a partir de ese día, Saúl miró con malos ojos a David.
Saúl habló a su hijo Jonatán y a todos sus servidores de su proyecto de matar a David. Pero Jonatán, hijo de Saúl, quería mucho a David,
y lo puso sobre aviso, diciéndole: "Mi padre Saúl intenta matarte. Ten mucho cuidado mañana por la mañana; retírate a un lugar oculto y no te dejes ver.
Yo saldré y me quedaré junto con mi padre en el campo donde tú estés; le hablaré de ti, veré que pasa y te lo comunicaré".
Jonatán habló a su padre Saúl en favor de David, y le dijo: "Que el rey no peque contra su servidor David, ya que él no ha pecado contra ti. Al contrario, sus acciones te reportan grandes beneficios.
El se jugó la vida cuando derrotó al filisteo, y el Señor dio una gran victoria a todo Israel. Si tanto te alegraste al verlo, ¿por qué vas a pecar con sangre inocente, matando a David sin motivo?".
Saúl hizo caso a Jonatán y pronunció este juramento: "¡Por la vida del Señor, no morirá!".
Jonatán llamó a David y lo puso al tanto de todo. Luego lo llevó a la presencia de Saúl, y David quedó a su servicio como antes.

Salmo 56(55),2-3.9-10.11.12-13. 
Ten piedad de mí, Señor, porque me asedian,
todo el día me combaten y me oprimen:
mis enemigos me asedian sin cesar,
son muchos los que combaten contra mí.

Tú has anotado los pasos de mi destierro,
¡recoge mis lágrimas en tu odre!:
¿acaso no está todo registrado en tu Libro?
Retrocederán mis enemigos el día que te invoque. Sé muy bien que Dios está conmigo.

confío en Dios y alabo su palabra;
confío en él y ya no temo:
¿qué pueden hacerme los hombres?
Debo cumplir, Dios mío, los votos que te hice:

te ofreceré sacrificios de alabanza,

Evangelio según San Marcos 3,7-12. 
Jesús se retiró con sus discípulos a la orilla del mar, y lo siguió mucha gente de Galilea.
Al enterarse de lo que hacía, también fue a su encuentro una gran multitud de Judea, de Jerusalén, de Idumea, de la Transjordania y de la región de Tiro y Sidón.
Entonces mandó a sus discípulos que le prepararan una barca, para que la muchedumbre no lo apretujara.
Porque, como curaba a muchos, todos los que padecían algún mal se arrojaban sobre él para tocarlo.
Y los espíritus impuros, apenas lo veían, se tiraban a sus pies, gritando: "¡Tú eres el Hijo de Dios!".
Pero Jesús les ordenaba terminantemente que no lo pusieran de manifiesto.